La ley podría criminalizar a los cristianos y a los padres que se oponen a la ideología de género
El proyecto de ley destinado a prohibir la llamada “terapia de conversión”, que prohíbe a los cristianos predicar la verdad bíblica sobre la sexualidad, presentado por la baronesa Burt de Solihull, enfrenta críticas y preocupaciones en el Parlamento del Reino Unido. Durante la segunda lectura en la Cámara de los Lores, los miembros advirtieron sobre posibles impactos en la libertad de expresión, la libertad religiosa y los derechos de los padres.
Según Christian Today , el presidente del Partido Unionista Democrático (DUP), Lord Morrow, afirmó que el proyecto de ley, en su forma actual, socavaría la legítima libertad de expresión y la vida familiar privada. Expresó su preocupación por la imposición de multas a padres y líderes religiosos por expresar sus creencias, y destacó que esto afectaría negativamente a la democracia.
La obispo de Bristol, Vivienne Faull, cuestionó la falta de una definición clara en el texto y su posible interferencia en las opciones de los cristianos que buscan asesoramiento sobre cuestiones relativas a la identidad de género y la sexualidad. Lord Strathcarron advirtió que la prohibición propuesta podría abarcar incluso la “oración silenciosa”, criminalizando a los líderes religiosos.
El proyecto de ley es criticado por su amplitud y sus afirmaciones de dirigir opiniones en lugar de prevenir daños reales. Varios pares destacaron que las prácticas abusivas ya están cubiertas por las leyes existentes, cuestionando la necesidad de legislación adicional. Algunos miembros destacaron las implicaciones para la libertad de expresión, la religión y la paternidad, enfatizando la importancia de no seguir el camino de legislación similar en otros lugares.